EFEMERIDES
29 de noviembre de 2023
DÍA DEL YAGUARETÉ: QUEDAN SOLO 250 EJEMPLARES EN LA ARGENTINA
Es el felino más grande de nuestra región, tercero en el mundo (luego del tigre y del león) y está en peligro crítico de extinción en el país.
El felino más grande de nuestro país está en peligro crítico de extinción. Por eso, este miércoles 29 se celebra el Día del Yaguareté, para concientizar sobre la conservación de la especie y poner en valor el importante rol que posee para el ambiente, el bienestar y la salud de los ecosistemas, y de las personas en las áreas donde habita.
¿CUÁL ES LA SITUACIÓN DEL YAGUARETÉ EN ARGENTINA?
Originalmente, el yaguareté habitaba desde el norte de la Patagonia hasta las provincias del norte de Argentina. Sin embargo, el hábitat natural, y por ende su población, fueron drásticamente reducidos y/o alterados.
En la actualidad, se estima que en nuestro país habitan 250 yaguaretés en las yungas (Salta y Jujuy), Misiones, y la región del Gran Chaco (Chaco, Formosa y Santiago del Estero).
Sin embargo, poco menos de la mitad viven en la selva misionera, que es la porción argentina del Bosque Atlántico, donde se mantiene una población de 93 yaguaretés.
Se estima que quedan menos de 20 individuos distribuidos entre las provincias de Chaco, Formosa, Salta y Santiago del Estero.
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE CONSERVAR AL YAGUARETÉ?
La conservación de este felino va mucho más allá de la protección de una sola especie. La conservación exitosa del yaguareté es fundamental para mantener los bosques saludables, las reservas de carbono, la biodiversidad, la disponibilidad de agua y el patrimonio natural y cultural, entre otros. Además, también ayuda a diversificar las oportunidades económicas para las comunidades locales y contribuyen a mitigar y adaptarse al cambio climático global.
Por ello, su conservación y la de su hábitat protegen indirectamente a otras especies de flora y fauna, y permite generar las condiciones de una naturaleza sana para las personas.
Las amenazas que afectan al yaguareté, o tigre –como lo suelen llamar en varias zonas rurales de Misiones y Gran Chaco-, son la deforestación y la pérdida de hábitat, la cacería y el atropellamiento de yaguaretés y otros animales.
La especie fue reconocida por un 35% de la población argentina como el animal silvestre más emblemático de la fauna argentina y el 97% consideran que su extinción sería muy grave.